Infórmate

ave playera

Por la conservación de las aves playeras

Las playas chilenas son el hábitat de numerosas especies, donde realizan procesos vitales, como su alimentación y disposición de sus nidos, claves para su supervivencia.

Las estadísticas son claras: en el último tiempo han descendido las poblaciones de aves playeras en el mundo. Por este motivo, es fundamental el desarrollo de políticas públicas que se hagan cargo de esta problemática medioambiental.

Destaca el trabajo de la Red para la Protección de las Aves Playeras, que reúne a interesados en la conservación de este grupo de pájaros y la protección de sus hábitats.

aves playeras

Con el proyecto “Red de monitoreo de aves playeras para la protección de humedales costeros en Chile”, ejecutado gracias al financiamiento del programa Humedales Costeros, se buscó visibilizar y proteger a escala regional algunos humedales de la costa árida y semiárida del Pacífico sudamericano.

El propósito es monitorear al pilpilén común (Haematopus palliatus) y al chorlo nevado (Charadrius nivosus), dos especies que enfrentan diversas amenazas, así como generar información que apoye la protección de sus hábitats.

El pilpilén común se alimenta en el intermareal, escarbando en la arena o aprovechando las pozas que se generan en esa zona. Según lo descrito en Norteamérica, depreda sobre todo caracoles, lapas, cangrejos, ostras, mejillones y almejas. Esta especie posee un pico largo y grueso que se asocia al consumo de invertebrados con concha y cuerpo blando.

En tanto, la dieta del chorlo nevado, en especial de los pichones, es poco conocida. Sin embargo, se ha descrito que comen invertebrados (anélidos, moluscos, crustáceos, insectos), capturados en el área intermareal y entre restos orgánicos en la orilla del mar.

Peligro sostenido

Por desgracia, las poblaciones de este grupo de aves han disminuido y son descritas como el segundo grupo con mayor declive poblacional en el mundo. Esta crítica situación se debe a que las aves playeras son vulnerables a perturbaciones naturales y antropogénicas.

chorlo nevado

La pérdida y degradación del hábitat, el tránsito de motos y otros vehículos sobre zonas de nidificación, actividades recreativas poco planificadas y la presencia de perros son algunos de los factores que amenazan sus poblaciones.

El tránsito de vehículos por estos ambientes implica consecuencias en ecosistemas, como pérdida y fragmentación de hábitat, erosión, compactación del suelo, destrucción de vegetación y sitios de reproducción. Además, afecta la actividad reproductiva de estas aves, incluso huevos y pichones se ven expuestos a perder la vida.

El proyecto “Playas Sin Autos”, de la ROC, ha buscado crear conciencia sobre esta problemática, con la instalación de señaléticas en sitios claves, como el Humedal de Cartagena, la desembocadura del río Aconcagua en Concón, La Serena, Tongoy, Mejillones y Curepto.

Agradecimientos: Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile (ROC) www.redobservadores.cl, y revista El Playero